La elección de compra de una persona es el resultado de la interacción compleja de factores culturales, sociales, personales y psicológicos. En la edición anterior habiamos visto los dos primeros factores, los culturales y los sociales. En esta edición terminaremos de ver los dos últimos, los factores personales y los psicológicos. En muchos de ellos no puede influir el mercadólogo, sin embargo, son útiles porque identifican a los probables compradores. Cuanto más acabado sea el conocimiento que tengamos de aquellos a los que les interesa adquirir nuestros productos o hacer uso de nuestros servicios, más aún podremos ofrecerles aquello que realmente desean tener. [...]